La historia de Diego
Diego Hernández es oriundo de Ciudad de México y está cursando sus estudios de Doctorado en Ingeniería Civil en la Universidad de Auckland. Su investigación se centra en la respuesta holística y el diseño de tanques de almacenamiento de líquidos expuestos a una carga sísmica. En 2016, Diego obtuvo una beca del Conacyt.
Experiencia
"Trabajé con tanques de almacenamiento durante mi licenciatura y máster en Ingeniería Civil en la UNAM, Universidad Nacional Autónoma de México. Quería entender más sobre la respuesta sísmica de los tanques para poder contribuir de alguna forma mejorando el diseño de aquellas estructuras básicas, especialmente para los tanques que contienen aceite o petróleo que podrían ser una amenaza seria en áreas en las que los terremotos son frecuentes.
"La beca y el apoyo que he recibido del Conacyt no tiene precio. Gracias a esa estabilidad económica, puedo concentrarme completamente en mis estudios. El proceso de solicitud de la beca del Conacyt es fácil pero lleva tiempo; uno tiene que ser paciente".
"Nueva Zelanda ofrece más que educación de alta calidad. Las diversas actividades al aire libre y el entorno cosmopolita que podemos disfrutar en Auckland son invaluables. Además, mi interés en expandir mi conocimiento sobre las culturas del Pacífico fue crucial a la hora de elegir la Universidad de Auckland.
"Antes de comenzar mi doctorado estudié inglés en México durante dos años y luego en Nueva Zelanda durante cinco meses. Sin embargo, todavía tengo dificultades para entender el acento "Kiwi".
Vida en el campus
"Realmente me gustan los edificios viejos del campus; me parecen fascinantes. Por ejemplo, la Torre del reloj es extraordinaria, justo en el corazón de la Universidad. Trabajar en mis experimentos en el laboratorio de pruebas de Ingeniería Civil fue una experiencia muy agradable. Probablemente aprendí más de los experimentos que hice allí, que estudiando directamente de libros.
"El personal académico de la Universidad de Auckland es amigable y servicial. Estas características son muy poco comunes en un entorno académico en México, y la diversidad cultural de la Universidad es increíble. Me he hecho muchos amigos, de casi todos los lugares del mundo. Hace unos meses hice una lista de las personas que he conocido y de sus lugares de origen, y conté más de 60 países.
Explorando el futuro
"Lo mejor de vivir en Auckland es la vida al aire libre. Es increíble cómo cambia el paisaje a unas pocas horas en auto de Auckland.
"En mi tiempo libre intento encontrar un equilibrio entre la vida "real" y mis estudios. Me inscribí en algunos de los clubes de la Universidad y diría que fue una de las mejores decisiones que he tomado. Con el Club de Senderismo de la Universidad de Auckland (AUTC, por sus siglas en inglés) he visitado diversos lugares y aprendido un montón sobre la fauna de Nueva Zelanda, particularmente en las montañas.
"Además con el AUTC, tuve la oportunidad de ir a Christchurch a una carrera llamada TWalk. El objetivo era encontrar pistas en las montañas y teníamos 24 horas para encontrarlas a todas. Fue una experiencia maravillosa y única.
"Si disfrutas de explorar la naturaleza, estudiar en una institución de calidad y aprender sobre diferentes culturas, Nueva Zelanda es una opción genial. "Puede que sea difícil, pero definitivamente vale la pena".
La Universidad de Auckland y el Conacyt
En 2016, la Universidad de Auckland firmó un acuerdo con el Conacyt para que todos los años brinde financiamiento para que hasta 20 estudiantes de doctorado estudien en la Universidad. El acuerdo también contempla visitas de estudio para hasta un año en cualquier país. En Nueva Zelanda, los estudiantes internacionales pagan las mismas tarifas para un doctorado que los estudiantes nacionales, aproximadamente USD $5000 al año.